Miradas comunitarias por la conservación de la naturaleza y la cultura. El caso de la Asociación Civil Sacromonte Chalchiumomozco de Amecameca
ENVIADO POR EL EDITOR EL Jueves, 11/04/2024 - 12:21:00 PMRoberto Conde* y Gerardo Páez**
La Asociación Civil Sacromonte Chalchiumomozco (ACSC) comienza con la reunión de vecinos de Amecameca, para organizar la salva de cohetes para el Miércoles de Ceniza, en 2006. Se juntó la cooperación y alcanzó para componer las campanas del santuario del Señor del Sacromonte, dado que el santuario se encontraba en condiciones muy lamentables.
Después de componer las campanas, se organizó una reunión un sábado por la mañana. Ese mismo año, estando sentados en la ladera de Guadalupita, pasó la señora Lidia Rosales Conde y al mirarnos sentados exclamó, —¡Ya no hay hombres en Ameca!—, pues la Capilla de Gualupita estaba llena de basura y maleza. La mayoría se sintió conmovido con estas palabras y se acordó que cada sábado se realizaran faenas voluntarias para limpiar la iglesia.
En uno de esos sábados se recorrió todo el cerro para conocer el estado que guardaba la montaña. En una cueva —en el cerro— encontramos a un grupo de personas venerando una Santa Cruz, nos sorprendió porque no esperábamos que en el Sacromonte existieran aún estos rituales agrícolas de petición de lluvias. Después de convivir por un tiempo con los campesinos, los invitamos a participar en la ACSC, esto sucedió un dos febrero, día de la Virgen de la Candelaria y del inicio del ciclo agrícola en Amecameca. Al siguiente sábado la reunión se llevó a cabo en el atrio del santuario, la primera acción que se realizó fue limpiar la cueva del Sacromonte la cual estaba llena de basura. De esa cueva salieron muchas brujerías y hechizos, se hizo una fogata donde se quemaron todas las impurezas del sitio. A partir de este acto de limpieza, el número de asociados aumentó y de forma voluntaria cada sábado se organizaba una comida en y con la montaña; poco a poco, al ir reparando el santuario fueron surgiendo más problemas y más trabajo.
Figura 1, Trabajos de mantenimiento en la iglesia del Señor del Sacromonte. Fotografía: ACSC, 2010.
La organización de la Asociación Civil Sacromonte Chalchiumomozco
La ACSC se organizó en tres comisiones, la primera dedicada a la organización de las fiestas patronal del Miércoles de Ceniza; la segunda centrada en la investigación histórica de Amecameca, pues en aquellos años, la mayoría de los asociados desconocía la historia de nuestra comunidad y en particular la del cerro del Sacromonte; la tercera se enfocó a la reforestación y el cuidado de la biodiversidad de las Áreas Naturales Protegidas (ANP) del Parque Nacional Sacromonte (PNS) y el Parque Nacional Izta-Popo (PNIZP).
La comisión de la fiesta patronal del Miércoles de Ceniza
Los encargados de las celebraciones religiosas, se dedicaron a reorganizar la festividad del Miércoles de Ceniza, que en ese tiempo no había ningún tipo de organización. En aquel tiempo había muchos accidentes y asaltos, la basura y excrecencias que dejaban los visitantes en la montaña era un fuerte foco de infección que se quedaba en el cerro.
Para organizar a la ACSC se convocó a las autoridades municipales, religiosas y locales. Entre el 2015 y el 2016 se logró controlar con el apoyo de los guardaparques, la subida y la bajada de los visitantes al Santuario del Señor del Sacromonte, se reguló y se asignó un espacio especial para el mercado fuera del Parque Nacional Sacromonte para proteger el bosque y las áreas de reforestación; se prohibió el comercio irregular; se reorganizó la quema de la salva, se controló la procesión del Señor del Sacromonte y se le dio un nuevo impulso a las cuatro mayordomías que dan inicio a la festividad, conocidas como vísperas; todo esto con la finalidad de reafirmar nuestro compromiso con el cuidado de las tradiciones y el medio ambiente.
Figura 2. Quema de la salva. Fotografía: Ramsés Hernández Lucas, 2013.
La comisión de la historia de Amecameca y el cerro del Sacromonte
El grupo encargado de la historia recopila la información de las fiestas que se celebran en el cerro del Sacromonte y en los distintos barrios que conforman a nuestra comunidad: el Rosario, San Juan, Tepoyo, Panoaya y el pueblo de Zentlalpan, anteriormente Tlailotlacan.
Desde 2006 y hasta la fecha, la ACSC ha trabajado con varias escuelas, organizaciones e instituciones dedicadas a la investigación histórica, antropológica y arqueológica, entre las que destacan la Dirección de Estudios Históricos (DEH), la Subdirección de Arqueología Subacuática (SAS) del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH); el Instituto de Investigaciones Históricas (IIH) y el Instituto de Investigaciones Antropológicas (IIA) de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM); el Colegio de Antropología (CA) de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP), entre otras.
Cuenta con una editorial comunitaria, la cual ha publicado dos libros: El amaqueme y la construcción del paisaje en el Iztaccíhuatl y Popocatépetl y Nahualac. Relatos sobre ofrendas contadas en el Iztaccíhuatl, ambos bajo la autoría de la historiadora Margarita Loera (el segundo en coautoría con el antropólogo Ramsés Hernández, ambos investigadores de la DEH, INAH). Además, ha participado dando pláticas sobre la historia y la arqueología de Amecameca y el Cerro del Sacromonte, impartiendo cursos de la lengua náhuatl y organizando congresos. Por otra parte, ha contribuido en las diversas investigaciones arqueológicas de la región, así como en las investigaciones antropológicas sobre la comunidad de Amecameca.
Figura 3. El presidente de la ACSC con el libro El amaqueme y la construcción del paisaje en el Iztaccíhuatl y el Popocatépetl. Fotografía: Ramsés Hernández Lucas, 2015.
La comisión de reforestación y cuidado de la biodiversidad de las ANP del PNS y el PNIP
La ACSC también ha interactuado con otros sectores académicos, por ejemplo, gracias al apoyo brindado por un grupo interdisciplinario de la Universidad Autónoma Metropolitana, unidad Iztapalapa (UAM-I), logramos conocer con exactitud el estado edafológico del cerro.[1]
Se realizó también un muestreo con semillas de árboles nativos como el encino (Quercus ilex), el fresno (Fraxinus americana) y el chalcapulin (una especie nativa en vías de ser clasificada), así como un inventario de todos los árboles más viejos.
Por otra parte, se hizo un estudio del heno (Tillandsia usneoides) o en lengua náhuatl pachtle (hierba que se cría y cuelga de los árboles), plantas medicinales, flores, hongos[2] y aves.[3]
En el ámbito de la conservación del patrimonio ecológico de los volcanes, desde el año 2008 se ha intentado reforestar, en el cerro del Sacromonte, pero lamentablemente el suelo presenta mucha resequedad, por lo que se ha dificultado la restauración de este ecosistema.
Se ha participado con el Parque Nacional Izta-Popo (PNIP) y la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp) en los trabajos de restauración y conservación de los sistemas boscosos de alta montaña. Llevando con éxito la reforestación y mantenimiento de 450 hectáreas en los parajes del Paso de Cortés conocidos como El Caracol, Ayoloxochitl, Palo Triste y Agua Dulce.
Figura 4. Reforestación en el cerro del Sacromonte.
Fotografía: ACSC, 2022.
Figura 5. Reforestación en el Paso de Cortés.
Fotografía: ACSC, 2022
* Presidente de la Asociación Civil Sacromonte Chalchiumomozco.
** Secretario suplente de la Asociación Civil Sacromonte Chalchiumomozco.
[1] Gilberto Vela Correa, Forma y estabilidad estructural de agregados del suelo en el cerro del Sacromonte, Amecameca, Estado de México, México, UAM-I, 2019.
[2] María Flores Cruz, Diagnóstico de las características físicas, socio-culturales y ambientales del Parque Nacional Sacromonte, Amecameca, Estado de México. Proyecto multidisciplinario, para la restauración del cerro Sacromonte, Amecameca, Estado de México, México, UAM-I, 2016.
[3] Marco Mendoza-Rodríguez, Primer listado ornitológico del Parque Nacional el cerro de Sacromonte, Amecameca, Estado de México y su asociación con la flora, México, UAM-I, 2017.