Sergio Ortega Noriega en el Seminario de Historia de las Mentalidades
ENVIADO POR EL EDITOR EL Miércoles, 29/01/2025 - 11:34:00 AMJosé Abel Ramos Soriano*
La relación de Sergio con el Seminario de Historia de las Mentalidades comenzó en 1978, desde la formación de este grupo de trabajo, ya que fue uno de sus fundadores. El Seminario se inició por un convenio firmado entre la embajada de Francia en México, a través del Instituto Francés de América Latina, y el Instituto Nacional de Antropología e Historia, por medio del entonces Departamento de Investigaciones Históricas (DIH), actualmente Dirección de Estudios Históricos (DEH). Sergio representaba a México, en tanto que Solange Alberro y Serge Gruzinski estaban por parte de Francia. Estos últimos se encontraban en México realizando su respectivo doctorado de Estado sobre la época colonial para la Universidad de París.[1]
El objetivo del Seminario era difundir en México la historia de las mentalidades, una corriente en boga no exenta de polémica, principalmente en Francia, que se interesaba en temas —en ese entonces— poco abordados por la historiografía tradicional: grupos marginales, la familia, las mujeres, los niños, las creencias, la religiosidad, etc., una “nueva historia”. El seminario se denominaba de Historia de las Mentalidades y Religión en el México Colonial, y planeaba analizar las mentalidades en la sociedad novohispana por medio del núcleo de su organización, la familia, además de aspectos relacionados con ella, como el matrimonio y los comportamientos sexuales.
Las actividades del grupo de trabajo comenzaron el año mencionado con sesiones los jueves por la tarde, en las que sobre todo los historiadores franceses comentaban cuestiones y estudios relacionados con mentalidades y posibles temas de estudio sobre la historia de México. Asistían a las reuniones investigadores del propio Departamento y de otras dependencias del INAH y de diferentes instituciones, como la Escuela Nacional de Antropología e Historia, la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM y el Archivo General de la Nación. También acudía el profesor francés Francois Giraud. Un producto de esas reuniones fue el libro Introducción a la historia de las mentalidades.[2]
El trabajo por seminarios era cotidiano en el DIH, ya que en la década de los setenta se habían formado varios de ellos: los de Historiografía Económica e Historia Urbana en 1971, el de las Haciendas Mexicanas en 1972, el de Historia Económica 1521-1910 y el de Formación de Grupos y Clases Sociales en el Siglo XIX en 1975, el de Demografía y el de Estructuras y Movimientos Sociales en el Siglo XIX en 1976, el de Historia de la Agricultura en 1977, entre algunos otros. La historia económica estaba en boga y los seminarios se dedicaban principalmente a “[…] los siglos coloniales y abarcaron los espacios nacionales y regionales, los diversos sectores económicos y los grupos empresariales y trabajadores”.[3] Sergio había colaborado principalmente en el Seminario de Historia Económica.
No sólo en el DIH la década de los setenta fue especialmente activa, pues el INAH en general se enriqueció con el ingreso de numerosos jóvenes en sus diferentes áreas. En el Museo del Virreinato, por ejemplo, se iniciaron en la vida profesional restauradores, museógrafos, fotógrafos, investigadores y futuros especialistas en diversas especialidades. Como en el DIH, quienes se iniciaban contaron con la dirección, asesoría o apoyo de trabajadores experimentados que ya laboraban en las dependencias o en otros lugares, dentro o fuera del Instituto.
En enero de 1979 se incorporaron al Seminario de Mentalidades Jorge René González Marmolejo y José Abel Ramos Soriano, con lo que el grupo, último de la década de los setenta en el DIH, inició un novedoso, largo, ambicioso y fructífero proyecto de investigación. Lo idearon y dirigieron Sergio Ortega, Solange Alberro y Serge Gruzinski, estos últimos como especialistas en dicha corriente historiográfica. El número de sus integrantes de base y temporales fue aumentando y ha variado con el tiempo. En la antología del Seminario publicada en el año 2000 se reunieron textos de una veintena de colaboradores que habían formado parte del grupo en diferentes épocas.[4]
Ese año de 1979, además de los jueves, comenzaron las sesiones de cada martes entre las 16:30 y las 19:00 horas para, en un ambiente de plena camaradería, planear las actividades y comentar los avances de investigación de cada uno de los miembros del Seminario y, a veces, de algunos invitados. Así se han obtenido importantes resultados individuales y colectivos hasta la fecha: encuentros académicos, conferencias, ponencias, tesis de grado, artículos, libros, etcétera.
Cuando asumió la coordinación del Seminario de Mentalidades, Sergio tenía ya experiencia de investigación en estudios sobre historia económica y regional, así como en el trabajo de equipo. Una muestra de ello fue su tesis de doctorado y posterior libro que trabajó en gran parte en el Seminario de Historia Económica del DIH.[5] La publicación trata sobre el noroeste de México y es referencia obligada para estudiar la historia económica y social de la zona. En el Seminario de Mentalidades Sergio incursionó en una corriente histórica novedosa en México. El homenaje que el Seminario le ofreció en 2006, giró en torno a sus temas generales de estudio: mentalidades, economía y región.[6]
De acuerdo con el proyecto general del Seminario, Sergio se abocó sobre todo al estudio sistemático de lo que la Iglesia, la principal institución normativa de la conducta de la sociedad, predicaba en torno a la familia y los comportamientos relacionados con ella, como el matrimonio y la sexualidad. Particularmente lo que decían los escritos sagrados y los teólogos que sustentaban la doctrina cristiana: el discurso teológico del Nuevo Testamento y de Santo Tomás de Aquino, así como los teólogos y la teología novohispana, las obras, los autores y el contexto de su elaboración y su trascendencia en la sociedad; principalmente el discurso, pero también la práctica por diversos grupos sociales. Al mismo tiempo, no dejó de lado balances sobre los avances y perspectivas de trabajos del Seminario en su conjunto. Así, sus análisis son punto de referencia obligado para entender las prácticas diarias en el virreinato novohispano. Resultados parciales de sus investigaciones fueron publicados principalmente en los libros colectivos del Seminario.[7]
Sergio fue coordinador por diez años, de 1978 a 1988, un periodo sumamente productivo: se celebraron, además de las conferencias de difusión y otras actividades académicas, tres simposios internacionales;[8] se elaboraron ocho libros colectivos y se presentaron seis tesis de licenciatura que se desarrollaron dentro del grupo.[9] De estas últimas Sergio fungió también como director. Él mismo había comenzado a impartir un curso con el enfoque de mentalidades en la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM, institución en la que también realizó trabajo académico para el Instituto de Investigaciones Históricas.
Durante su periodo como coordinador, terminó el convenio entre el INAH y la embajada de Francia, pero continuaron las actividades del Seminario. Serge y Solange permanecieron un poco más y nuestro homenajeado, después de dejar sus funciones como coordinador, siguió participando activamente en el grupo como los demás integrantes, con sus siempre aleccionadoras aportaciones y atinados comentarios. Motivos de salud lo obligaron posteriormente a retirarse, pero no del todo, pues mantuvo contacto con el mismo; continuó dirigiendo tesis, en adelante de maestría y doctorado. Incluso siguió con el estudio de la familia en Nueva España con algunos otros compañeros. Como a la mayoría de quienes trabajamos con él, la historia de las mentalidades lo había atrapado.
Sergio mostró siempre una tremenda capacidad de trabajo aun a costa de su salud, seriedad en sus aportes científicos, estricta disciplina en todas sus actividades, camaradería, amistad y disposición a apoyar a cuanta persona se le acercaba. Por todo ello, el maestro, el compañero, el amigo, dejó honda huella en el Seminario y, estoy seguro, también en los demás ámbitos que frecuentó. Gracias, Sergio.
* Dirección de Estudios Históricos, INAH.
[1] El tema de Serge Gruzinski era sobre la aculturación de los indígenas del altiplano en el siglo XVI, y el de Solange Alberro sobre la Inquisición de México durante los siglos XVI y XVII.
[2] Solange Alberro y Serge Gruzinski, Introducción a la historia de las mentalidades, México, Departamento de Investigaciones Históricas-Instituto Nacional de Antropología e Historia, 1979.
[3] Inés Herrera Canales, “La construcción de la historia económica de México en la Dirección de Estudios Históricos”, en Jorge René González M, (coord.) Mentalidades, economía y región, Siglos XVI al XIX, Homenaje a Sergio Ortega Noriega, México, INAH, 2012, pp. 95-112.
[4] Seminario de Historia de las Mentalidades, Vida cotidiana y cultura en el México virreinal, Antología, México, INAH, 2000.
[5] Sergio Ortega Noriega, El edén subvertido, La colonización de Topolobampo, 1886-1896, México, INAH, 1978.
[6] Jorge René González M. (coord.), op.cit.
[7] Como ejemplo véase “Bibliografía”, en Seminario de Historia de las Mentalidades, Vida cotidiana y cultura…, op.cit.
[8] Familia, matrimonio y sexualidad en Nueva España (1981), La memoria y el olvido (1983) y Familia y poder en Nueva España (1986). Ver José Abel Ramos Soriano, “El Seminario de Historia de las Mentalidades (1978-1998)”, en Seminario de Historia de las Mentalidades, Vida cotidiana y cultura…, op.cit., pp. 9-14.
[9] Las referencias bibliográficas de estos trabajos, se localizan al final de la sección Homenaje, Obras de Sergio Ortega Noriega.